El dorado es un color que tiene mucha personalidad. Este tono se encuentra fuertemente asociado al glamour y la sofisitcación. Hoy te mostramos cómo incorporarlo a tu hogar.

Este color se lleva muy bien con los ambientes de aires retro que optan por la elegancia. Para evitar crear un espacio abrumador, lo mejor es optar por colocar el dorado en los detalles.

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La década de los ’70s también es una gran aliada de este color.  Aquí el dorado se presenta en a través de un espejo insignia de esos años.

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El dorado se hace notar con mucha facilidad.  Gracias a esta característica puede dejar su impronta a través de pequeños destellos como los tirantes de los muebles.

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Si hablamos de sofisiticación, el dorado y el negro conforman un dúo perfecto e insuperable.  Aquí la elegancia aumentó gracias al uso de textiles en clave animal print.

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Otra dupla que nunca falla es la conformada por el dorado y el blanco.  Esta combinación es perfecta para crear espacios luminosos y elegantes.

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Imágenes vía: El blog del decorador