Hoy en día resulta cada vez más usual el uso de ladrillos en las paredes interiores del hogar.  Esta idea es una buena forma de agregar diseño y un toque diferente a cualquier espacio de la casa. Veámos algunas propuestas!

Para empezar arrancamos con una idea que dejará a más de uno con la boca abierta.  Se trata de combinar los ladrillos naturales con otros pintados en un tono impactante como el turquesa.  Esta idea se convierte en el marco perfecto para una cocina que se encuentra a mitad de camino entre lo rústico y lo fabril.

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El ladrillo también puede ser una buena manera de separar zonas en un mega ambiente.  De hecho una guarda de ladrillos en una pared es capaz de actuar como límite bien claro.

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Los colores de la gama de los tierra son las alternativas más usuales de los ladrillos ya que son las tonalidades en las que estos pequeños bloques son fabricados.

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Sin embargo, hoy en día se puede personalizar los ladrillos fácilmente con un poco de pintura.

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Los ladrillos están elaborados de un  material poroso que le otorga una gran resistencia.  Además, y como si fuera poco, el ladrillo es buen aislante y relativamente económico.

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Fuente: El rincón de Sonia