Colocar un banco en la zona en la que se come es una gran opción. Esta elección aporta frescura, originalidad y mayor espacio para sentarse. Es una gran forma de sacar buen partido a los ambientes pequeños. Veámos algunas alternativas.

El banco de obra es ideal para aprovechar espacios. Como todos los muebles de obra, el banco también es práctico y estable. Eso sí, resulta ser algo más complejo cambiar los muebles de lugar!

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El banco puede estar especialmente concebido para formar parte de una cocina.  En este caso pertenece al mismo juego de muebles.  Una opción moderna y confiable.

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El banco de madera cumple una doble función en este ambiente:  otorga buen espacio para sentarse y actúa como contrapunto.

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Los bancos no tienen porqué ser rígidos ni duros.  De hecho pueden encontrarse variantes mucho más cámodas como este banco estilo capitoné, un detalle que otorga confort y distinción a la cocina.

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La mesa redonda se lleva muy bien con los bancos.  El juego de formas genera dinamismo sin por eso  dar lugar a la pérdida de armonía.

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Imágenes vía: Mrs Boho y Apartment Therpay